Mediante la inhalación de cannabis pueden mejorar varios síntomas en los pacientes con enfermedad de Parkinson.
Este es el resultado de un estudio clínico abierto realizado con 22 pacientes en el Departamento de Neurología del Hospital Beilinson de Petah Tikva y en la Facultad de Medicina Sackler de la Universidad de Tel Aviv, Israel. Los enfermos, que asistieron a un centro médico entre 2011 y 2012, fueron evaluados al inicio del estudio y 30 minutos después de fumar cannabis.
La puntuación media total en la escala motora Unified Parkinson Disease Rating Scale mejoró significativamente de 33’1 al inicio del estudio a 23’2 después del consumo de cannabis. El análisis de los síntomas motores específicos reveló una mejora significativa después del tratamiento en temblor, rigidez y bradiquinesia. También hubo una mejora significativa de las puntuaciones de sueño y dolor. No se observaron efectos adversos significativos. Los autores concluyen afirmando que “el estudio sugiere que el cannabis podría tener un lugar en el arsenal terapéutico de la enfermedad de Parkinson”.
Cortesía de IACM
Asociación Internacional por el Cannabis como Medicamento.